El sitio de disposición transitorio de Puntra aún espera la resolución de las entidades medioambientales para conocer cuál será su destino y -por sobre todo-, cuando se iniciará este camino. Principalmente, debido a que la Corte Suprema no se ha pronunciado respecto al detalle de qué trabajo debe ser realizado, y que se considera un Estudio de Impacto Ambiental para obtener los permisos necesarios, de ser requerido el transporte de material hacia algún sitio de disposición final, que tampoco está definido, ya que ningún relleno sanitario ha dado autorización para ello.
Pese a esta incierta situación el municipio ancuditano, a través de la Dirección de Medio Ambiente, Aseo y Ornato, se ha preocupado de hacer las labores preventivas necesarias para mantener el sitio ubicado en el sector de Puntra El Roble. Primordialmente para mantener la seguridad medio ambiental del lugar, pero también para dar garantías de que se encuentra bajo un plan de manejo que certifique que no hay ningún tipo de riesgo.
Guillermo Saavedra, especialista en temas de residuos y que ha sido asesor de la Municipalidad Ancud en diversos estudios relacionados con el manejo de rellenos sanitarios, quien es, además, asesor de cinco rellenos en la zona centro sur de Chile, establece que, si bien es cierto, este tipo de proyectos tiene una complejidad técnica importante -en particular Puntra, dado los antecedentes- y de acuerdo a los estudios realizados de estabilidad que se efectuó entre octubre y noviembre pasado, “dada la caracterización de los lixiviados que se genera en la biodegradación de la basura, y así como la caracterización de la base de residuos, podemos decir fehacientemente que es un relleno sanitario, en términos técnicos, normal. No hay ninguna diferencia respecto a otros sitios de disposición final del sur del país”.
Aseguró el experto que, como en todo este tipo de instalaciones, es necesario estar permanentemente haciendo los cuidados propios que tienen que ver con el mantenimiento de canales de agua lluvia y el mantenimiento de la cobertura. “Tras el año pasado, en julio, se tomó la decisión y que fue bastante efectivo, de colocar un polietileno en todo el manto del relleno. Eso disminuyó ostensiblemente la generación del lixiviados y ha ayudado a mantener niveles bajos, lo cual da seguridad, en términos de estabilidad operacional. Por lo tanto, hay que continuar eso”.
CONTROLES
Asimismo, indicó que se realizan todos los controles propios de estas instalaciones: monitoreo de aguas, tanto subterráneas o subsuperficiales y superficiales; así como monitoreo de gases. “Y está a la luz de los antecedentes técnicos: se considera que los parámetros están dentro de lo normal. Por ende, hay que continuar esa línea, más allá de todo el tema administrativo y comunicacional, que ha sido polémico. Pero, del punto de vista técnico, se puede estar tranquilo de que es un proyecto que está controlado, que está bien manejado”.
Los estudios específicos que son puntuales, y hay controles que son periódicos como el monitoreo de gases que se está haciendo en forma semanal, “y se reporta a la autoridad ambiental, en particular a la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), que está muy al tanto de los controles que se están haciendo. Está el monitoreo de agua que, dependiendo del punto, son de carácter semestral”, aclaró Saavedra.
El retiro del lixiviados de acuerdo a la media provisionales que estableció el SMA, se hace semanalmente también. Por lo tanto, el mantenimiento de las variables más relevantes de este relleno sanitario, se están manteniendo controladas. “En particular, todo lo que tenga que ver con monitoreo de aguas, pero también hay otros estudios relacionados con fauna que están algunos en desarrollo y otros que se monitorean y se hace con laboratorios debidamente acreditados, por tanto, sus resultados son confiables”, indicó el experto.
Valentina Jiménez, encargada de la oficina técnica ambiental de la Dimao, señaló que se realiza un trabajo diario con el personal. “Ese trabajo se basa principalmente en lo que es extracción del lixiviado, mediciones piezométricas. Lo que hoy día también se pudo ver es el tema del arreglo y más que nada la cobertura del polietileno, del sellado provisorio del recinto. Se va arreglando al menos una vez a la semana, por el tema de los vientos y otros. Éstos se corrigen dentro la semana y, además, lo que son las mantenciones de los canales de agua lluvia, para tener también un parámetro controlado de cómo está hoy en día”.
Respecto a las atenciones que se deben tener respecto a este cubrimiento, la profesional del municipio aclara que hay dos visiones relativas a la complejidad del clima. “En invierno hay que preocuparnos de que ingrese lo cantidad menor posible de agua a lo que es la zanja. Y eso se hace a través de lo que es este sellado provisorio con polietileno que tenemos, por eso es súper importante que ese se encuentre en perfecto estado para que este ingreso sea lo menos posible en lo que es aporte, que posteriormente sea generación del lixiviado en el recinto”.
De esta manera, se sostiene el monitoreo constante del cerrado centro provisorio de acopio de residuos sólidos domiciliarios, a la espera del pronunciamiento de las autoridades, tanto medioambientales como judiciales, de cómo se procederá con el futuro de Puntra El Roble. Considerando que se espera que un lapso no muy prolongado, la provincia tenga una solución conjunta para los desechos del archipiélago, en atención a una serie de reuniones que el mismo municipio ancuditano desea concretar con las nuevas autoridades gubernamentales de la materia para plantear la importancia y urgencia de una salida, para dejar atrás todos los vertederos no autorizados que se mantienen funcionando en Chiloé.
